miércoles, 28 de diciembre de 2011

Balance 2011

Por la salud y la paz, la magia y los milagros, y las sonrisas. Así terminé brindando el año pasado, así arranqué sonrisienta, con una ceremonia de té que prometía todos los cumplimientos de los sueños. Ha sido un año en el que sin dudas, brotaron las semillas de sueños plantadas. Se hacen realidad verdemente, se iluminan con la luz que Rodri y yo les damos. Y crecen. Siguieron teniendo protagonismo las caras de la infancia que se asoman al Facebook y a alguno que otro encuentro que nos hace recordarnos y seguir queriéndonos. Qué más? Rodri está en la cuenta regresiva con su medicamento y eso emociona, claro. Nos hace dar cuenta además que se va la infancia, el “petit mal” no se hace adolescente, al menos eso esperamos…se vinieron los granitos con toda la fuerza y mamá corre con la cremita…recorrimos la secundaria, la sufrimos, la disfrutamos también. Acompañamos el sentimiento de los amigos de la montaña que se bañaron en cenizas y que a seis meses de esta catástrofe? practican un brindis con la frente alta. Un año eleccionario, se reafirmaron las fuerzas políticas y se renovó la esperanza de una sociedad más justa. Las abuelas encontraron a la nieta número 105, y su lucha por la memoria, la verdad y la justicia es un ejemplo que el mundo entero realza. Ahí está, este es un buen brindis para terminar este año, por las luchas, por los que seguimos de pie, por los sueños crecidos, salud!

jueves, 8 de diciembre de 2011

Día de la Virgen con ceibo en flor

Ceibo de cerca

Ceibo de lejos

Ceibo con rosita rococó


Yo sé que se viene el verano cuando florece el ceibo, planta prestada de la gente cálida del norte, planta que vino de semilla, de mano en mano, de lejos, de mi amigo Aquilino, de corazón rojo como esta grandiosa flor sensual y erótica que da calor como el verano que se viene...

domingo, 30 de octubre de 2011

Dónde está Cenicienta?

No es una instalación, les aseguro. Iba caminando y lo ví. En una vereda, perdido zapato y expuesto para ser encontrado? Así es Buenos Aires de insólita y precisa, así es cualquier ciudad que se precie de ser mujer caminada, recorrida, con andar descalzo y sentido, para dejar huellas profundas en la piel o en el empedrado, planta a planta. Juego, como siempre a dar un nombre a las cosas: “abandono”, “me perdí”, “busco a mi par”, “dónde está Cenicienta?”, “recorridos rengos”,”la pisada”, “casa de gato”, “no me mees”, jaja, lo peor es que pasé por ahí seis meses después y el zapato sigue igual, misma posición, lo que bien podría titularse “aún espero” o “persitencia”.


miércoles, 21 de septiembre de 2011

Arcoiris en un ojo



El tema musical es de Guiye Frayo, el video clip es de Cinehumus y desde aquí les hago un homenaje a ellos y a todos los que como yo tienen un arcoiris en alguna parte de su cuerpo o de su alma.

martes, 30 de agosto de 2011

domingo, 31 de julio de 2011

Primeras flores. Damasco.



Damasqueando de muy cerca...




Un poquito más lejos...




Ahora damasqueando otro cachito más lejos...




Lejos hasta el cielo...


jueves, 30 de junio de 2011

Ceniceando

Cuando los volcanes despiertan de largas temporadas en las que adormecidamente van juntando coraje para bramar, no es fácil que acallen pronto. Descargan la energía que viene desde su corazón de piedra y hacen llover piedritas que nos caen inoportunamente en invierno. Nos pulen la piel hasta dejar las mismas grietas que llevan en sus propias laderas. Nos tapan de cenizas hasta que el verde y el azul desaparezcan y un respirar sea el sinónimo confundido de vivir. Únicamente con los genes de quienes han vivido varias guerras se puede tomar a esta catástrofe con algo de optimismo, es el caso de mi amiga Bety que vive en Villa La Angostura y seguramente de muchas de las gentes que eligieron vivir en las fronteras de su propia vida.

martes, 21 de junio de 2011

Ceniceando con mi amiga Bety de Villa La Angostura

El 21 de Junio, el cielo con una lengua de fuego...Con Bety hicimos la escuela primaria y nos une la extraña fuerza de haber compartido la niñez y de saber en silencio que transitamos los mismos patios, las mismas maestras, las mismos pizarrones...hoy queremos compartir los escenarios de nuestra nueva vida y las fotos van y vienen en viajes por mails. Así seguimos unidas. Yo sufro los días de cenizas que me va contando...

Las primaveras florecieron abajo de la ceniza...conmueve, emociona, dan fuerzas para seguir sacando...60 carretillas por día...

Espacios públicos, público variado trabajando! LLegaron al pueblo muchos voluntarios, mientras otros muchos habitantes se iban...

Los bichos, entre ellos las arañas, también trabajan, redoblando esfuerzos, y las telarañas nos atrapan en imposibles tejedumbres...

El Loco de la Bici lo apoda su madre. A mi me gusta llamarlo el Ángel de la Bicicleta de Villa, se le atoraban los cierres pero igual tenía necesidad de naturaleza...de aire...aunque esta vez fuera sucio.

Mi bandera, nuestra bandera, siempre, del color del cielo...hoy gris, ceniceando...

El espantapájaros en pie, sin pájaros. No fue esta vez, el que espantó, a los pájaros.

miércoles, 25 de mayo de 2011

viernes, 15 de abril de 2011

Otoño 2011

LLega el otoño y me pongo a separar bulbos, es hora de que los hijos hagan su propio andar en la tierra... Empieza a hacer frío y dan ganas de acurrucarse en una bolsita de té. Planto rápido antes de que se vaya el solcito de la tarde...


jueves, 14 de abril de 2011

Robert Doisneau


El 14 de abril de 1912 nacía Robert Doisneau en Gentilly, Val-de-Marne, París. 31 años después tomaba esta fotografía, Le Remorqueur, que yo adoro porque es toda ternura, hermandad, juego, unión, amor. Este año está acá en Buenos Aires para poder disfrutar su obra de más cerca. El 1 de abril de 1994 Doisneau moría pero antes nos dejaba muchos besos románticos, conflictivos, emocionantes, apasionados y contagiosos de dos enamorados parisinos…gracias!





sábado, 5 de febrero de 2011

Veranazo (a pedido del público)



Esta peonía tuvo que estar dormitando en su capullo durante 7 años, el día que floreció nos brotaban lágrimas y sonrisas, como el valsecito...y al igual que éste el aroma también parece venir de otros tiempos, fragancia antigua, olor a talquito como los de antes
.



El verano tiene olor a salvia...




Y a jazmines...




Tiene ruido de fiestas y color de petunias que se compran en Navidad para engalanar las ventanas...




El verano es sinónimo de arrayán florecido, cuando plantamos los arrayanes nos llegaban a la rodilla. Les puse un goteo y una sombrilla porque el verano en el valle brilla mucho, hoy miden 3 metros y ya se acostumbraron a nuestro sol...



El verano es un estanque con fiesta de ranas...



Geranios a flor de suelo...



Y althaeas a flor del cielo...



El verano tiene ganas de rododendro con gusto a Bariloche...



y de mar con gusto a Las Grutas.



El verano en el valle es de rosas, manzanas, cerezas, piquetes, lago, mucho trabajo, asado, calor, cuatro riegos, bicicletas, karting, calle...



Existe en el valle, la Ciudad de las Rosas, la Fiesta Nacional de la Manzana, la Fiesta de la Pera, la Fiesta Provincial del Agua y en medio de tanta fiesta los gremios de los rurales, del hielo y de la fruta queman cubiertas para alcanzar derechos. El problema es que no ven el revés de los derechos, cada vez se ocupan menos hombres en estas faenas y los hombres no podrán asisitir a ninguna fiesta...



En verano nos llenamos de luz, vivimos más horas, oscurece tarde y visitamos amigos, trabajamos más, paseamos más, caminamos más, hacemos más gimnasia, leemos más, regamos más, y seguramente reímos más que en cualquier otro momento del año...



Les cuento una historia...desde el jardín de nuestros amigos de Bariloche vino este rodo, que es un hijito de un rodo grande plantado por ellos hace fácil 25 años. Desde acá, desde el valle viajó un acer palmatum. Este fue un intercambio en donde quedaron en la tierra las raíces de nuestra amistad.



Empiezo y termino con la peonía porque es lejos mi flor preferida. Y también viene con historia. Como tarda tantos años en florecer, el primer año que florece (que es el séptimo) uno mira, toca y huele a la flor como si fuera el ser más preciado que hay sobre la tierra. Para preservar aquella joya, mi amiga le dijo a su hijo Fran de 2 o 3 añitos que no se le ocurra tocar a la flor porque era altamente venenosa, que se miraba de lejos. Entonces Fran que era un chico muy inteligente, salvó la vida de todos, agarró un palo muy largo con el que azotó a la flor y acabó con ella y todos sus males. Quedará siempre esta anécdota en mi corazón.