El 21 de Junio, el cielo con una lengua de fuego...Con Bety hicimos la escuela primaria y nos une la extraña fuerza de haber compartido la niñez y de saber en silencio que transitamos los mismos patios, las mismas maestras, las mismos pizarrones...hoy queremos compartir los escenarios de nuestra nueva vida y las fotos van y vienen en viajes por mails. Así seguimos unidas. Yo sufro los días de cenizas que me va contando...
Las primaveras florecieron abajo de la ceniza...conmueve, emociona, dan fuerzas para seguir sacando...60 carretillas por día...
Espacios públicos, público variado trabajando! LLegaron al pueblo muchos voluntarios, mientras otros muchos habitantes se iban...
Los bichos, entre ellos las arañas, también trabajan, redoblando esfuerzos, y las telarañas nos atrapan en imposibles tejedumbres...
El Loco de la Bici lo apoda su madre. A mi me gusta llamarlo el Ángel de la Bicicleta de Villa, se le atoraban los cierres pero igual tenía necesidad de naturaleza...de aire...aunque esta vez fuera sucio.